Lo que muchos padres estamos esperando....
26/09/2008
El artículo del país me lo remite la Fundación de la Escuela Cristiana de Catalunya, dentro de su listado de correo. No tiene desperdicio alguno. En el mundo educativo sajón ya hace tiempo que se mueven en los entresijos de la inteligencia emocional aplicada al día a día en las aulas. Aquí aún nos quedan algunos años de ver cómo los profesores y las profesoras se ponen "como una moto" ante las respuestas de los alumnos. Y lo peor no es ponerse "como una moto", no, que es algo inevitable. Lo importante es saber qué hacer después con todas esas emociones (guardarlas, añaden baja autoestima, acumulación de falta de ilusión del profesorado,....).
Los que estáis en el ramo de la enseñanza sabéis muy bien a qué me refiero.
La falta de manejo de las propias emociones en el profesorado va desde la Educación Infantil (los famosos p3, p4, p5) hasta la ESO.
Os pongo un ejemplo de esta semana.
Una mamá me viene algo inquieta por el comportamiento de una profesora con su hija de 4 años. El conflicto ,del que omito los detalles, es una simple anécdota de las muchas que pasan en una clase de p4, no llega a problema como tal. La gota que colma el vaso es que al día siguiente, cuando va a recogerla la madre: la niña está llorando la niña en un rincón de la clase y la profesora no se había dado cuenta. Al preguntar la madre la profesora responde con un "no sé" muy seco. La mamá, muy sensible, encuentra a faltar tacto y emoción por parte de la profesora.
La tranquilizo en la conversación conmigo y le animo a que exprese sus sentimientos a la profesora y que aclare las situaciones. Las profesoras de E. I. ya saben lo pesado que es tener una familia con reticencias y desconfianzas a lo largo del curso.
Los profesores a medida que vean ventajas, van a ir cambiando planteamientos en su forma de hacer las cosas.
Desat a: Guarderías/Ed. Infantil,
Adolescencia,
Infancia
